El clan brasileño del Madrid: música, futvoley, un ''ambientazo'' y la esperanza después de Mbappé

Marcelo, Militao, Casemiro, Rodrygo y Vinicius son claves en el vestuario. Los más jóvenes ganan peso tras el ''no'' de Mbappé. ''Tener a dos leyendas les ha ayudado a adaptarse más rápido''

Rodrygo marcó el gol de la victoria contra el Inter en San Siro, repitió junto al doblete de Vinicius en el 0-5 al Shakhtar en Kiev, Vinicius marcó en la semifinal de la Supercopa ante el Barcelona, Rodrygo anotó frente al Chelsea en cuartos y en el Pizjuán, en un partido decisivo por la Liga, Vinicius en la ida del Etihad contra el Manchester City y Rodrygo, de nuevo, en la vuelta del Bernabéu. Sus goles, junto a los de Benzema, han llevado en volandas al Madrid hacia la posibilidad de un triplete histórico, con Liga, Champions y Supercopa de España. Tres títulos que llevarían la firma brasileña en sus goles y en la solidez defensiva que ha mostrado el conjunto de Carlo Ancelotti durante gran parte de la temporada. Ahí han brillado Militao y Casemiro. Y a su lado, gestionando el vestuario, un Marcelo que ha sabido ser padre, profesor y mejor amigo de una nueva generación capital para el Madrid.

El quinteto de brasileños de Valdebebas es presente y futuro de Chamartín, clave en la parcela deportiva con sus goles y sus buenas actuaciones y «vital» en el buen ambiente que ha reinado en el vestuario durante esta temporada. Dos de ellos son ya leyendas, Marcelo y Casemiro, otro, Militao, es indiscutible en la defensa a pesar de un año más irregular, y los dos más jóvenes Vinicius y Rodrygo, aparecen como principales balsas de emergencia para la esperanza madridista después del «no» de Mbappé. «Tener en el vestuario a dos leyendas como Marcelo y Casemiro, compatriotas, les ha ayudado a adaptarse más rápido al Madrid. A entender lo que significa jugar aquí y a dar bien los primeros pasos en el club», cuentan desde el círculo cercano de las jóvenes estrellas de Chamartín.

Música, cenas y futvoley

En el vestuario, «y siempre que les deje Lucas Vázquez, que es el que manda con la música», suenan Thiaguinho o Léo Santana, los cantantes favoritos de Vinicius y Rodrygo. Siempre samba, entre risas y bailes. «Vini da ambientazo», bromean desde Valdebebas. Si su relación con Marcelo y Casemiro es más profesional, más de hermanos mayores y pequeños, de consejeros, la conexión del ex del Flamengo con Rodrygo y Militao va más allá de la ciudad deportiva. Salen a cenar, quedan para picarse a la consola o para jugar al futvoley en casa de Vinicius, y comparten intereses más parecidos que los que buscan Marcelo y Casemiro, de 34 y 30 años, casados y con hijos. «Son padres para los jóvenes».

El futuro más cercano del Madrid lleva el nombre de los brasileños. Militao, Casemiro y Vinicius serán titulares contra el Liverpool, mientras que Rodrygo es el gran revulsivo de Ancelotti junto a Camavinga. Marcelo, en el que puede ser su último partido, tendrá que verlo desde el banquillo y esperará levantar la orejona después de los noventa minutos. Con las renovaciones de Militao y Vinicius bien encaminadas y los contratos de Rodrygo y Casemiro asentados hasta 2025, la única duda es el siguiente paso de Marcelo.

A lo lejos, el interés en la nueva perla del fútbol brasileño, Endrick, que a sus 15 años ha acordado ya su primer contrato profesional con el Palmeiras hasta 2025. Ahí le esperará el Madrid, obsesionado y convencido de que los fichajes 'tipo Vinicius' son la mejor solución ante los clubes-estado. Él puede ser el futuro de un clan que mezcla veteranía y la juventud, la experiencia (cuatro Champions han ganado ya Marcelo y Casemiro) y el hambre de Militao, Vinicius y Rodrygo, que buscan ganan su primera Liga de Campeones.

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