Podemos y ERC culpan a Sánchez de no erradicar las 'cloacas' tras Pegasus y piden una investigación

''Existe un entramado mediático, empresarial y parapolicial, con recursos y armas reservadas a organismos estatales al servicio de intereses espurios''.

La crisis del caso Pegasus no termina y ni ERC seda por satisfecha con “la cabeza rodando” de Paz Esteban, directora del CNI hasta este martes, ni Unidas Podemos cree que Pedro Sánchez hay acabado con “la policía patriótica del PP”.

Todos los socios del presidente del Gobierno, los de la coalición en el Ejecutivo y los aliados parlamentarios han registrado este jueves una comisión de investigación en el Congreso para “averiguar la vinculación de diversos estamentos oficiales del Estado” en estas prácticas, que no habría acabado con “la moción de censura que llevó al Gobierno a Pedro Sánchez” precisamente tras la sentencia de la Gürtel y el “escándalo de la Kitchen”, que “demostraba según las conclusiones de diversas comisiones de investigación” que “el aparato del PP” había mantenido estas estructuras.

De hecho, según el escrito, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, “habría que remontarse a la época de la Transición y al 23-F” para entender que estas estructuras “parapoliciales” ya estaban optando entonces y que -por tanto herederas del franquismo- el presidente del Gobierno “no ha explicado en ningún foro qué ha hecho para desmantelarlas”.

Es más, según fuentes parlamentarias de los grupos firmantes de la petición, “el presidente no ha hecho nada, no ha limpiado ni el Ministerio del Interior ni el de Defensa y ha mantenido todas las cloacas del Estado sin limpiar y a sus responsables al frente”.

El escrito presentado este jueves en el Registro del Congreso es demoledor contra el presidente. Según se desprende de su lectura, cuatro de sus ministros, su vicepresidenta segunda, los 34 diputados de Unidas Podemos, los 13 de ERC, los cinco de Bildu, los dos de la CUP, los cuatro de Junts, los cuatro de PDeCAT, el de Compromís y el del BNG están convencidos de que existe un “entramado medióatico, empresarial y parapolicial, con recursos y armas reservadas a organismos estatales al servicio de intereses espurios al margen del interés general y presuntamente sufragados con fondos reservados”.